Medianera de todas las gracias es un título que la Iglesia católica da a la Santísima Virgen María; como Madre de Dios, incluye el entendimiento de que es medianera de la gracia divina. Además de Medianera, en la Iglesia se le dan otros títulos: Abogada, Auxiliadora, Benefactora.[1] En una encíclica papal del 8 de septiembre de 1894, el Papa León XIII dijo: "El recurso que tenemos a María en la oración se sigue del oficio que ella desempeña continuamente junto al trono de Dios como Mediadora de la gracia divina"[2].
El Concilio Vaticano II se refirió en su documento Lumen gentium a María como "Abogada, Medianera, Auxiliadora y Mediadora".